martes, 30 de abril de 2013

Debutamos en Castilla y León

Pocas comunidades autónomas españolas nos quedan por visitar. Ya una menos. Estuvimos en Valladolid, capital de Castilla y León. Para lo de siempre, animar al Sevilla Fútbol Club. Conseguimos con dificultades y ayudándonos de otras peñas organizar un autobús hasta tierras vallisoletanas. Todo por y para nuestro equipo. Para eso nacimos.

domingo, 14 de abril de 2013

Un domingo en San Fernando

Con el sabor amargo del derbi nos plantábamos siete peñistas a media mañana del domingo 13 de abril en el Prado de San Sebastíán para ir a San Fernando. Tras hacer un tour por Sevilla y sus barrios en busca de la pancarta, tomamos la carretera de Cádiz por la SE-30 y al mediodía ya estábamos callejeando en el isleño pueblo gaditano en busca del estadio.

Llegamos y fuimos recibidos por aficionados isleños en su magnífico local a pocos metros del Estadio Iberoamericano Bahía Sur. Una vez allí, el trato exquisito estuvo acompañado de horas de bebida y comida hasta que poco antes del comienzo partimos en amistosidad hacia el estadio. Ya en las gradas nos dispusimos a animar al Sevilla Atlético bajo un sol implacable. Lamentablemente el equipo no pudo puntuar, pero volvió a dejarse la piel y devolvió con saludos nuestra presencia en San Fernando.

Con el partido finalizado y tras habernos despedido de nuestros nuevos amigos cañaillas, nos montamos de nuevo en el coche y de vuelta a casa, cerrando así un fin de semana de pleno sevillismo que comenzó el mediodía del viernes en la previa del derbi y que acababa cuando anochecía el domingo tras el desplazamiento a San Fernando para ver al Sevilla Atlético. Este es nuestro plan.


Por S.M.A.O.

viernes, 12 de abril de 2013

Otra vez otro derbi, otra vez viajo a verte

¿Qué vamos a contar del derbi? De fútbol no hablamos. Para eso ya hay muchos blogs que analizan el juego de nuestro equipo. Nosotros, a animar. Y a animarnos. El derbi como visitantes de esta temporada era atípico. Un viernes y antes de la Feria. Aún así, comenzamos a prepararlo desde el mediodía por Nervión junto con muchos otros sevillistas que luego nos acompañarían hasta la grada del Benito Villamarín. Tras la comida, la bebida y los cánticos, nos situamos bien dentro de la comitiva sevillista y como si fuéramos debajo de un palio, andando sobre los pies y juntitos hasta el campo rival. Escoltados por la Policía y entrando tempranito. Magnífico. Colocamos nuestra pancarta en el vomitorio y nos dispusimos a animar al equipo. Acabó el partido y con el ánimo un poco tocado volvimos tranquilamente hacia Nervión con la mirada puesta en el siguiente desplazamiento: Valladolid. Mientras haya vida, habrá esperanza. Y mientras haya vida, habrá vengoavertenses siguiendo al Sevilla Fútbol Club.